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Con más de 5.700 metros de altura a su alrededor, contiene una extensa reserva ecológica de parámos y bosques andinos, hogar de cóndores, venados y oso de anteojos. Representantes de la Unión Europea, delegados del Ministerio del Ambiente del Ecuador e investigadores nacionales e internacionales escogieron este paisaje, para anunciar lo que los científicos vienen estudiando y advirtiendo desde hace muchos años: que la contaminación de la atmósfera está acelerando el deterioro del planeta.

Durante la visita científica realizada el 29 de junio de 2017, expertos advirtieron que el glaciar del Antisana disminuye a un ritmo de entre 20 y 25 metros cada año y que sólo en las dos últimas décadas ha retrocedido alrededor de 350 metros. En la actualidad, el pie del glaciar se ubica en los 4.850 metros de altura y las proyecciones indican que de continuar esta tendencia podría avanzar hasta los 5.300 metros, esto significa un retroceso de 475 m de la cobertura glaciar en altura.

Para el PhD. Luis Maisincho, investigador permanente del Instituto Nacional de Meteorología e Hidrología (INAMHI) y certificado por la Senescyt, quien lleva más de 12 años monitoreando el glaciar, afirma que su retroceso es “irreversible”.

El investigador manifesto: “Vemos que la temperatura está aumentando, las precipitaciones están disminuyendo y eso implica que el glaciar no puede avanzar, no puede ganar masa”, explica. El retroceso de estos glaciares tropicales andinos “es grave para las ciudadades de la región andina, como Quito, La Paz o Lima que dependen en un cierto grado de ellos para su abastecimiento de agua potable”, agrega.

“Con más de 20 años de datos hemos constatado o podemos dar fe de que existe un verdadero impacto del cambio climático sobre el glaciar”, manifestó Luis Maisincho.

Basado en datos arrojados por una red de instrumentos instalados en el lugar, el científico agregó que este es un indicador que responde a las fluctuaciones del clima como el aumento de la temperatura (0,8 grados centígrados en el último siglo) y la disminución de las precipitaciones.

Para el año 2050 se prevé que la superficie del glaciar, que actualmente abarca unos 12 kilómetros 
cuadrados, se reduzca en un 30% y los otros nevados del país atraviesan un proceso similar. El glaciar Carihuairazo podría desaparecer en los próximos años.

Según los resultados de la Tercera Comunicación Nacional de Cambio Climático, realizada por el MAE con colaboración del INAMHI, a nivel de la línea ecuatorial las temperaturas atmosféricas aumentarían entre cuatro y cinco grados centígrados en zonas de cordillera para finales del siglo XXI.

El embajador de Francia, Jean-Baptiste Chauvin, explicó que el ascenso al Antisana, organizado por el Instituto de Investigación para el Desarrollo (IRD), es un mensaje de apoyo al Acuerdo del Clima, firmado por casi todos los países del mundo, “pese al retroceso norteamericano”. En el acuerdo Estados Unidos, el mayor productor de gases de efecto invernadero luego de China, se comprometía a reducir las emisiones de los mismos entre 26% y 28% para 2025 en comparación con el año 2005.